Curiosidades

La Estética, siempre fue un referente para mí.
No sólo como fin último o una meta a alcanzar, a través del Dibujo y la Pintura,
sino también como un medio para realizar otras tareas.
Lo estético está a nuestro alrededor. Lo bello, al alcance de nuestras manos.
Sólo es necesario detenerse un momento para contemplarlo en las gotas de rocío deslizándose sobre los pétalos de una flor, en la sonrisa y la carcajada de los niños disfrutando de estar vivos, en el leve vaivén de las ramas de un árbol que se esfuman sobre un cielo soleado, contorneando una tenue penumbra en un camino fresco donde podemos descansar, en un farol compitiendo con las estrellas por iluminar la noche...
La Estética puede convertir lo cotidiano en algo mágico.
Se trata de hacer lo que hacemos, lo más estéticamente posible.

Por eso, hace años tuve la inquietud de aprender

a hacerlo conmigo misma, y comencé un curso de Modelos,

a partir del cual fui descubriendo las distintas posibilidades de armonizar mi Imagen con mi personalidad. Aprendí sobre los cuidados de uno mismo y que éstos pueden ser la base del bienestar.
Verse bien es sentirse bien, y recíprocamente, sentirnos bien hace que nos vean bien.
La vida es un regalo para ser vivida.
Nuestra Imagen es la presentación, el envoltorio. Y el contenido, nuestro ser.

En las fotos, puede observarse a Raquel Satragno,

quien fuera mi Profesora en su Escuela de Modelos